IV Edición: Recursos energéticos & mineros

Great Place to Work® Centroamérica & Caribe reconoce a Los Mejores Lugares para Trabajar 2021

Great Place to Work® Centroamérica & Caribe, realizó este mes de abril el evento de premiación para reconocer el “Ranking de Los Mejores Lugares para Trabajar® en Centroamérica y Caribe 2021”. Se contó con la participación de 145 organizaciones representando a más de 89,000 colaboradores encuestados. De éstas calificaron 132 organizaciones que ahora forman parte de Los Mejores Lugares para Trabajar® en Centroamérica y Caribe 2021, al lograr superar los resultados mínimos establecidos tanto en clima como en cultura organizacional, los cuales son evaluados a través del modelo Great Place to Work®.

Para el caso de Caribe se reconocieron 21 organizaciones que representan la opinión de más de 25,000 colaboradores y el análisis de la cultura organizacional de cada una. La mayor participación en Caribe es de República Dominicana, donde 14 organizaciones se encuentran dentro de la lista representando a más de 12,000 colaboradores. Tenemos una disminución significativa, pues el año anterior eran más de 33,000 los colaboradores que representaban a 24 organizaciones en República Dominicana.

Estas organizaciones fueron evaluadas a través de nuestro modelo aplicando dos herramientas: Trust Índex© que nos ayuda a medir el nivel de confianza a través de la encuesta de clima, y el Culture Audit© que nos ayuda a entender cómo la cultura impacta y se encuentra alineada a la estrategia de negocio.

El resultado de Trust Índex© en Caribe es de 84%; y para República Dominicana el nivel de satisfacción
es 90% donde resaltan fortalezas claves que impactan de manera muy positiva dentro del liderazgo, pues los colaboradores tienen una buena percepción de la honestidad y ética de los líderes. Durante la pandemia muchas organizaciones se vieron en la necesidad de tomar decisiones difíciles tales como recortes de presupuestos, reducción de beneficios o diferir algunas prestaciones, en otras fue aún más impactante porque tuvieron que realizar reducciones de personal o suspensiones de contratos.

En República Dominicana, los colaboradores percibieron la honestidad en las decisiones que tomaron sus líderes, las organizaciones buscaron mecanismos virtuales para estar más cerca de los colaboradores y la comunicación fue un elemento clave, pero más allá de comunicar el hacerlo con ética y honestidad fueron dos cualidades que resaltan en el estilo de liderazgo que se generó, esto de la mano con la manera en cómo se percibe el manejo del negocio, la competencia de manejar el negocio de una manera correcta y la forma en que se delegan responsabilidades. No sólo se distribuyen responsabilidades si no también se acompaña a los colaboradores empoderando a los equipos, a pesar de las dificultades que se generaron por la modalidad de trabajo, que representó un reto importante, ya que unos estaban presenciales, otros totalmente remoto y algunos en modalidad mixta, pero independientemente la modalidad de trabajo los colaboradores reconocen que estas fueron características de liderazgo que se evidenciaron hoy más que nunca, y que se deben mantener como fortalezas.

Otro tema sumamente importante, es que durante esta pandemia las organizaciones en República Dominicana se preocuparon por brindar no solamente las herramientas si no también los recursos para que los colaboradores pudieran continuar con sus labores y aportar a la organización.

A pesar de que muchas no tenían dentro de su estrategia a corto plazo la incorporación de trabajo remoto y otras sí lo tenían, pero no al 100% de los colaboradores; el entorno “obligó” a muchos a cambiar la modalidad de la noche a la mañana, y la mayor parte sin estar preparados del todo.

Otro aspecto que vale la pena destacar es el cuidado que se ideó dentro de las instalaciones para que éstas se consideren físicamente seguras para trabajar con distanciamiento social y todas las medidas de bioseguridad necesarias para que el colaborador perciba que el entorno es seguro.

Al llegar el momento de retornar o de tener modalidad mixta, las organizaciones cuidaron físicamente a las personas para evitar en la medida de lo posible los riesgos, algunas hicieron distribución de mascarillas, higienizaron los espacios, incluso se modificaron oficinas para que fueran abiertas o hasta áreas de descanso se eliminaron para brindar un entorno físicamente seguro.

Por otro lado, los resultados nos indicaron que las principales áreas de oportunidad se presentan al involucrar a los colaboradores en temas que tienen impacto en sus microclimas. En República Dominicana se habla mucho de diversidad e inclusión y ha mejorado considerablemente pero aún se tiene un camino por recorrer en ese sentido, pues la diversidad no es solamente género, raza o etnia, etc. o buscar el cumplimiento de “cuotas”, la diversidad; también está en ideas y en la medida en que se involucre a los colaboradores se podrá enriquecer la organización con esa diversidad de ideas que se pueden reflejar en aportación de sugerencias para reducción de costos, mejorar procesos, actualizar procedimientos, evitar desperdicios, en fin, ideas que impactan positivamente a los resultados de negocio. Este involucramiento también favorece la inclusión de aquellas personas que muchas veces en nuestros equipos no comparten sus ideas, personas que no opinan no porque no tengan algo que aportar, si no más bien porque no perciben el entorno apropiado para hacerlo.

  Es importante seguir fortaleciendo este tema, pues la innovación hoy más que nunca está generando una ventaja competitiva en las organizaciones; esta innovación que solamente los equipos diversos e inclusivos pueden generar, a través de los canales o mecanismos que se brinden no solamente como líderes si no también como organizaciones para que los colaboradores puedan aportar ideas o sugerencias con sistemas o programas de   reconocimientos alineados.

 

Otro tema que representa área de oportunidad es el favoritismo, que nuestros colaboradores perciban que como líderes evitamos tener personas favoritas o que los ascensos, o las oportunidades de crecimiento o desarrollo se generen solamente para éstas, este tema a nivel Latinoamérica ha representado por muchos años un área de oportunidad, sigue siendo en las organizaciones un área de oportunidad.

Ahora bien, cuando preguntamos a los colaboradores si consideran que sus organizaciones son un buen lugar para trabajar, el 92% de colaboradores en República Dominicana percibe que sí, sus organizaciones son buenos lugares para trabajar pues este nivel de confianza que representa “Excelencia” se ha construido con el paso del tiempo a través de la suma de esas acciones constantes que fortalecen la relación entre el colaborador y sus líderes, que no se construye “de la noche a la mañana”, pues en situaciones difíciles es donde queda en evidencia la fortaleza de las relaciones no solamente laborales si no también personales.

Muchos colaboradores comentaban que reconocen y agradecen a las organizaciones porque demostraron con hechos que ser parte de Los Mejores Lugares para Trabajar® no es solamente decirlo, se vive dentro de estas culturas y se fortalece cada vez más; que los buenos lugares para trabajar no se definen por los beneficios ni por las prestaciones, se definen por el nivel de confianza que construyen con estas relaciones que se ven reflejadas en un alto nivel de compromiso.

¡Gracias a estas organizaciones que forman parte de Los Mejores Lugares para Trabajar® en Caribe y en República Dominicana, porque comparten con nosotros, a través de sus culturas, nuestra misión de construir un mundo mejor para todos!