Con pasión y amor, fuertes valores y el deseo de innovación diversificar y expandir, la familia Rainieri ha construido un sólido grupo empresarial que es líder y emblema del sector turístico nacional.

El Grupo Puntacana es una empresa pionera en el turismo sostenible que, hace más de 50 años, tuvo la visión de desarrollar un destino y una comunidad inmobiliaria en un remoto y paradisíaco rincón de la región Este de la República Dominicana.

El sueño que comenzó con la construcción de 10 cabañas de playa y una casa club se ha convertido en un destino líder en el Caribe y Centroamérica, y en una auténtica marca país, con más de 44,000 habitaciones hoteleras.

Detrás de la consolidación de este gran proyecto, está el trabajo y dedicación de una familia comprometida con el país. Frank y Haydée Rainieri, y hoy sus hijos Frank Elías, Paola y Francesca han conformado un grupo empresarial integrado por más de 12 empresas y cuenta con una sombrilla de 15 mil colaboradores directos e indirectos.

Un sueño compartido por una familia pionera, que ha asumido el estandarte del turismo nacional es la protagonista de Gente de Éxito en esta edición que celebra los liderazgos que inspiran e impulsan el desarrollo del país.  

En el Grupo Puntacana existe una clara vocación de continuidad, ¿cómo fue el proceso para involucrar a sus hijos, hacerlos parte de la Empresa Familiar y de ese sueño empresarial compartido?

Nuestros hijos disfrutaron de su infancia en Punta Cana y de adolescentes se involucraron de maneras creativas en el proyecto mientras eran testigos del crecimiento paulatino y consistente del destino. Luego, comenzaron a enamorarse del sueño de todo lo que podía ser posible, la belleza de la naturaleza, y las comunidades y colaboradores con las que estábamos creciendo.

Creo que algo que nos une como familia es la pasión por el país y la gente. Para mis hijos Punta Cana es su hermano y para mis nietos es su vida. Es un sueño que no es solo mío, sino que fue creciendo, y hoy todos estamos involucrados.

La pasión y amor por Punta Cana que tienen nuestros hijos es una extensión del que Haydée y yo le hemos transmitido desde que inició el desarrollo del destino hace 53 años, el cual ha ido creciendo y fortaleciéndose con el correr de los años y su involucramiento en este proyecto, que no es solamente un proyecto comercial, sino también un proyecto de amor.

¿Cuál considera que es ese sello que distingue a la familia Rainieri y que la ha llevado a ser un grupo líder en la República Dominicana?

La visión pionera es nuestro emblema y la punta de lanza en muchas de las cosas. El deseo de innovar, diversificar y expandir, combinado con nuestro ADN de sostenibilidad y desarrollo social. Ese es nuestro sello.

En el mundo, solo el 27 % de los negocios familiares logran pasar de primera a segunda generación. Y de estos, tan sólo el 10 % llega a la tercera, ¿cuáles han sido las claves de la Familia Ranieri para mantenerse por más de 50 años? ¿Qué perspectivas tiene a futuro para el Grupo Puntacana?

El turismo está en las venas de nuestra familia. Mis abuelos migraron desde Italia a República Dominicana, donde se asentaron en Puerto Plata inaugurando el Gran Hotel Del Comercio y El Hotel Europa; y en Santiago de los Caballeros, El Hotel Rainieri. Siento que gracias a ellos y al amor que mis padres me inculcaron por el arduo trabajo y la industria del turismo, nosotros también hemos podido hacer lo mismo con nuestros hijos y nietos.

Precisamente, el poder hacer de este sueño un proyecto familiar en el que todos tenemos un rol, es lo que ha logrado extender un sentido de pertenencia a nivel generacional en el que todos entendemos la trascendencia de un legado y un propósito que incluso va más allá de nosotros.

Ha sido un trabajo de muchos años de Haydeé y mío, primero con mis tres hijos, y hoy con los de ellos. Nuestra labor ahora consiste en poder reforzar en los nietos la participación, entendimiento y comprensión de la empresa, para que puedan involucrarse y aprender a través del ejemplo y la práctica, mientras encuentran e identifican su rol en Grupo Puntacana.

                                                Frank Elías Rainieri, Presidente y CEO

Si las empresas familiares, como cualquier otra empresa en estos tiempos, no se reinventan y se adaptan al entorno competitivo en el que viven, mueren. ¿Cuáles han sido esos cambios que usted como líder ha tenido que realizar en el Grupo Puntacana?

Asumir la presidencia del Grupo Puntacana, con el gran legado que dejó mi padre y hacerlo en tiempos de cambios importantes como los que estamos viviendo a nivel global, especialmente en el sector turismo, es el desafío más grande de mi vida hasta este momento. Me siento honrado y privilegiado.

Tomar la antorcha de relevo de alguien que ha tenido una trayectoria como la de Don Frank, usualmente viene con comparaciones; aunque siempre he dicho que él ha dejado sus huellas, así como yo podré dejar las mías de manera única y celebrando el legado dejado por él. Don Frank es el mejor modelo y ejemplo a seguir que pudiera aspirar, un pionero del turismo sostenible en República Dominicana y un visionario que abrió camino a la creación del destino Punta Cana.

El gran desafío para Grupo Puntacana y para mí, junto a mis hermanas Paola y Francesca, es conseguir dar continuidad a ese gran legado empresarial y de valores que están impregnados en el ADN de nuestra familia y, a la vez, impulsar los cambios y las transformaciones en la organización y los modelos de negocio que nos permitan dar respuesta a las nuevas demandas de la sociedad y los entornos.

Necesitamos continuar atrayendo inversiones, aportar a la digitalización y a la sostenibilidad. Este modelo solo será posible si somos capaces de aunar la economía y la lucha contra el cambio climático que afecta a nivel mundial, pero que, en la República Dominicana, por ser una isla, va a tener una especial incidencia. Sobre todo, en países como el nuestro, donde nuestras economías dependen en gran manera de la industria turística, sabemos que nada será igual que antes, y necesitamos comprometernos a que ese impulso a la reducción del impacto ambiental y el desarrollo sostenible desde nuestro sector sea cada vez más importante.

Haydée Rainieri, Miembro del Consejo de Grupo Puntacana

La familia empresaria se caracteriza, entre otras, por su capacidad de emprender. Recientemente, el Grupo Puntacana ha apostado por la construcción del Punta Cana Free Trade Zone (PCFTZ): Centro Logístico Aéreo, Marítimo, Terrestre y Parque de Zona Franca. ¿Cómo ha sido el proceso de expansión del turismo hacia la inversión en otros sectores?                                                                            

La misión que hemos perseguido es conquistar diferentes mercados. Nuestra visión a futuro consiste en continuar siendo pioneros, impulsar la innovación y la movilización de la economía a través de la apertura de nuevos empleos, así como poder diversificar las estrategias de negocios.

A nivel empresarial, tenemos grandes proyectos de expansión inmobiliaria, así como nuevos hoteles y novedosos restaurantes y propuestas gastronómicas que contribuirán a la fidelización de nuestros clientes y la captación de nuevos visitantes.

Con el inicio de construcción del Punta Cana Free Trade Zone y la ampliación de la terminal B del Aeropuerto Internacional de Punta Cana, presentamos dos iniciativas que proyectan la visión de futuro con la que apostamos al desarrollo del país. Estos nuevos proyectos crearán más de 10 mil empleos y movilización económica en la región este y el país.

El proyecto reafirma el compromiso del sector privado en seguir creando las condiciones para el mejor aprovechamiento geográfico de la República Dominicana, y para la generación de mayores oportunidades en uno de los sectores trascendentales en la economía global como lo es la logística.

Esta es una oportunidad para aumentar la conectividad y la frecuencia aérea y marítima, permitiéndoles a los importadores y exportadores en el país abaratar los costos y producir mayores beneficios.

Estos innovadores proyectos a futuro, donde vamos a transformar todas las actividades complementarias de la isla, para que podamos seguir atrayendo turismo a la zona y, al mismo tiempo, permitir que Punta Cana siga siendo el destino líder en la región y entre los principales en América Latina.

Sr. Frank Elías Rainieri, Presidente y CEO

¿Cuál es el legado que, como familia empresaria, quieren dejar en el país?

Para Grupo Puntacana, el futuro es un asunto de gran responsabilidad y, nuestro compromiso, desde el principio, ha sido crecer de manera sostenible y en armonía con el medioambiente y las comunidades cercanas, manteniendo los valores familiares y pilares que dieron origen a la empresa.

Nuestro objetivo es continuar siendo los anfitriones de los millones de visitantes que llegan a través del Aeropuerto Internacional de Punta Cana y que disfrutan de su escape soñado en la zona turística y todo el país; apostando al crecimiento de la zona, a su desarrollo integral y al mejoramiento constante de las condiciones de vida de las comunidades donde tenemos la oportunidad de crecer, brindando oportunidades que permitan el acceso a la vivienda, salud de calidad, educación y recreación.

Seguimos imaginando más con la misión de continuar el desarrollo de activos, creando empleos y modelos de manejo empresarial que sean de referencia y prácticas sostenibles en la industria turística nacional e internacional, y sirvan de legado y relevo a las próximas generaciones.

Paola Rainieri de Díaz, Chief Marketing Officer (CMO)

En las empresas familiares prevalece el deseo de transmitir el patrimonio que se ha formado a las siguientes generaciones, y para ello, se les involucra y educa. ¿Está ya preparándose la próxima generación de la Familia Ranieri? ¿Cómo lo hace?

Mis hermanos y yo crecimos y disfrutamos de nuestra infancia y adolescencia en Punta Cana. En el proceso, nos enamoramos de este lugar asombroso, al igual que nuestros padres, y fuimos testigos de cuan duro trabajaron, sus valores y respeto hacia las personas y a la naturaleza.

La aspiración que tenemos para nuestros hijos, además de que sean felices con lo que hacen, es que aprendan la importancia del trabajo arduo, la ética laboral, el trabajo en equipo en todas las áreas, así como el amor al servicio y a su país.

Actualmente, una parte de la generación de los nietos (mis hijos y los de Francesca) está viviendo su etapa universitaria y de preparación y, cuando están de visita en Punta Cana, siempre buscan la manera de ser parte de los equipos de algún evento de temporada, proyecto, pasantía o vincular sus asignaciones de universidad con casos y ejemplos reales de la empresa.

Para nosotros es una alegría ser sus mentores en el área laboral por igual e inculcarles el amor por la empresa y lo que hacemos.

Una familia empresaria busca, además del éxito en los negocios, preservar los valores y las tradiciones familiares. ¿Cuáles son esos valores que han sido el pilar de la Familia Rainieri y que considera es importante seguir manteniendo como parte de la empresa?

Como familia tenemos esta filosofía de gestión como norte: “sin prisa, pero sin pausa”. Esto nos trae perspectiva de que, para lograr la excelencia y grandes cosas, los pasos y esfuerzos que damos deben ser estratégicos y constantes. La grandeza que deja un legado requiere tiempo para construirse.

Como familia y empresa nuestros valores principales son lealtad, ética, calidad y servicio, y la responsabilidad social y medioambiental. 

¿Qué lugar ocupa la sostenibilidad dentro del Grupo Puntacana? ¿Cómo articula la familia sus decisiones y acciones sostenibles?

La sostenibilidad es el ADN de nuestra empresa. Con la certeza de que una empresa, además de generar riquezas, debe trascender los límites del negocio, desarrollamos múltiples iniciativas con una filosofía social cimentada en cuatro pilares: trabajo, educación, salud y vivienda.

El resultado de nuestros programas e iniciativas sociales se traducen a más de 150 mil personas recibiendo asistencia médica de calidad en centros médicos público-privados, más de 7 mil bachilleres y técnicos egresados de sus centros educativos, y miles de niños y jóvenes que disfrutan sanamente en parques y áreas deportivas.

Mientras que nuestra visión medioambiental se traduce en 6 mil metros de tejido de coral sembrados, decenas de especies endémicas preservadas, 20 % de la demanda eléctrica proveniente de fuentes renovables y más de 3 millones de galones de agua y 7 toneladas de desechos, reciclados diariamente.

Desde nuestros orígenes, estos son pilares esenciales y ejes de trabajo, por lo que cada decisión y estrategia trazada, se orienta al crecimiento y bienestar de la comunidad, y en armonía con la naturaleza.

Sabemos que el verdadero desarrollo de una sociedad y la capacidad de una empresa para competir no es sostenible sin invertir en la gente. Debemos trabajar para que el desarrollo sea sostenido y sostenible. Personalmente, creo que la educación es justamente la que nos puede llevar a lograr mayor sostenibilidad, porque la sostenibilidad es asunto de todos.

Francesca Rainieri de Caro, Chief Financial Officer (CFO)

¿Cómo han logrado estructurar el gobierno corporativo a nivel familiar y empresarial? ¿Cuáles son las claves para tener un gobierno corporativo de éxito como empresa familiar?

Cuando Frank Elías asume la presidencia, Paola y yo no podíamos estar más orgullosas de él, y estábamos listas para trabajar de la mano como aliadas estratégicas.

Para los tres era de suma importancia honrar la visión y labor de nuestros padres, y asimismo incorporar las nuevas ideas de innovación que siempre habíamos soñado para expandir y diversificar a la empresa.

Don Frank se mantiene como presidente de Fundación Grupo Puntacana y presidente del Consejo de Grupo Puntacana, y Doña Haydée es miembro del consejo de Grupo Puntacana y dirige varias iniciativas a través de la Fundación Frank y Haydée Rainieri. Estamos sumamente agradecidos de contar siempre con su apoyo y consejo. 

En todas las áreas y estructuras de la empresa, no solo a nivel ejecutivo, se promueve el trabajo en equipo, la colaboración; así como el respeto mutuo por la especialidad y punto de vista de cada uno. Esa es la clave para un gobierno corporativo exitoso.

Cada uno de mis hermanos tiene una preparación y talentos diferentes, y cuando trabajamos sistemáticamente, creando la confianza y el espacio para que cada uno aporte sus ideas y presente lo mejor que tiene, es algo muy especial y grandioso lo que podemos lograr.

Quizás la fortaleza más importante que posee una empresa familiar es la unidad de los miembros de la familia empresaria. ¿Qué opina al respecto? ¿Cuál es la fortaleza más grande de la Familia Ranieri que les ha permitido ser líderes en el turismo nacional?

Definitivamente, la unidad es el mayor atributo de fortaleza que puede cultivar una familia, y también una empresa.

Creo que nuestra cualidad más grande y también lo que nos ha permitido crear un legado tan especial, es nuestra pasión. La pasión por el trabajo, la gente, el medioambiente, nuestros colaboradores, nuestra comunidad y, sobre todo, nuestro país, es lo que nos ayuda a dar la milla extra y a perseguir la excelencia en todo lo que hacemos.

Muchas personas piensan que las empresas familiares son más resilientes a los cambios internos y externos, ¿cómo ha sido la experiencia del Grupo Puntacana frente a las inminentes transformaciones que impone el mundo de hoy?

Durante 53 años de historia los cambios y transiciones internos y externos que hemos experimentado son incontables. Precisamente, porque también somos una familia empresarial, hemos tenido que permanecer unidos y leales sin importar los retos que se presenten.

La mayor lección aprendida es la adaptabilidad. Adaptabilidad a la economía, transiciones políticas, fenómenos naturales, digitalización, plataformas tecnológicas, variaciones del mercado y medios de consumo de nuestros clientes. El mundo se encuentra en constante cambio.

Como familia y empresa, hemos podido desarrollar cualidades de resiliencia, flexibilidad y creatividad, precisamente al caminar escenarios que no habíamos vivido o planificado, precisamente por su falta de precedencia. Todos los desafíos y cambios enfrentados han sido oportunidades para crecer y evolucionar.