Innovación, emprendimiento y tecnología son términos que van de la mano en el escenario económico mundial. La evidencia muestra que los países con altos niveles de desarrollo son aquellos que también destacan por sus altos niveles de innovación y emprendimiento.

La pandemia del Covid-19 aceleró la transformación digital, que, a su vez, ha sido un acelerador del cambio integral de los negocios y de sus modelos, así como del cambio en las necesidades de los consumidores. De allí que la innovación se ha convertido en un motor clave para el crecimiento económico.

Quizás antes, hace unos pocos años, innovar era tan solo una opción que algunas empresas tomaban como parte de su estrategia, ahora es una obligación y se ha transformado en la razón de ser de las compañías y en el génesis de muchos emprendimientos.

Ante este nuevo ecosistema empresarial, se han creado nuevos productos y servicios que transforman el mercado y generan una red de valor, se está reduciendo drásticamente los riesgos ambientales y ecológicos, se simplifican procesos y reducen costos, se mejora la productividad, por solo nombrar algunos aspectos.

En esta edición, buscamos conocer el escenario del emprendimiento y la innovación en la República Dominicana, si se han dado pasos firmes en esa ruta y el impacto que ha tenido en el crecimiento de la economía, partiendo de la premisa que, además, el proceso de transformación e innovación permite a las empresas contribuir con la sostenibilidad del país.