Un espacio plural que busca impulsar agendas de consenso en la región
La búsqueda por el desarrollo sostenible, el diálogo y la cooperación, coloca al desarrollo productivo y empresarial como uno de los ejes principales de la organización.
Como organismo internacional al servicio de Iberoamérica, la Secretaría General Iberoamericana, SEGIB, tiene la particularidad de desarrollar un espacio común, en base a una cultura e historia compartida, conformado también por dos lenguas y vinculando a América Latina como un puente de encuentro.
Esteban Campero, responsable de Economía y Empresas de la SEGIB, expresa que uno de los ejes fundamentales de esta organización es el desarrollo productivo y empresarial. “Necesitamos más y mejores empresas que generen empleos de calidad, por eso estamos trabajando con los ecosistemas emprendedores”, apunta Campero.
¿Qué expectativas tiene la SEGIB con la XXVIII Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno que se realizará en Santo Domingo en marzo 2023?
Para la próxima Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado nuestras expectativas son muy altas por varios motivos: primero, es la primera cumbre después de los confinamientos, y los empresarios y empresarias de la región merecen reunirse cara a cara para retomar el vínculo. Segundo, es la Cumbre de la recuperación, en este escenario incierto en contexto de guerra y ante la reconfiguración de las cadenas globales de valor, es importante discutir y conversar acerca de las oportunidades que ofrece Iberoamérica. Tenemos que recuperar la inversión y volver a generar empleos de calidad. Para eso hay que impulsar reglas de juego claras, generar confianza y pensar en perspectiva de integración productiva, tenemos más oportunidades de relevancia en bloque en una economía globalizada y en constante cambio.
¿Qué impacto real tienen las recomendaciones y conclusiones que surgen de encuentros empresarial en el marco de cumbres políticas, como la Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado?
Las recomendaciones tienen un impacto directo en nuestras acciones de cooperación, fijando prioridades y enfoques de ejecución. Pero también tienen un impacto no menos importante en la incidencia que generan, instalando agenda en la conversación política para que los gobiernos le aporten prioridad. Tan importante como el qué es el cómo, estamos orgullosos de la plena participación de todos nuestros países, un espacio plural que busca impulsar agendas de consenso.
El lema de la próxima cumbre es “Una Iberoamérica Justa y Sostenible, ¿qué tan cerca estamos de alcanzarla?
Ese es el desafío. Para llevarlo a la acción debemos tener una hoja de ruta clara, un diagnóstico adecuado y una vocación y decisión que traccionen. América Latina es la región donde más impactó la pandemia, donde más se sintió la crisis económica con cierre de empresas y datos socioeconómicos preocupantes. Celebro este lema para comprender también la oportunidad: la recuperación tiene que plantearse desde los pilares de la sostenibilidad. Sostenibilidad en un sentido amplio que involucra nuestro compromiso con el planeta y con las generaciones futuras y también con el desarrollo local.
En la meta de cumplir los ODS para 2030, ¿qué papel ha jugado la SEGIB?
La SEGIB abraza los ODS desde siempre. Toda nuestra acción está planteada desde su lógica, su transversalidad y el involucramiento de actores. La perspectiva de género, la innovación o la lucha contra la pobreza atraviesan todos nuestros programas. También lo tomamos como una correcta estrategia de medición.
¿Cuáles son los fundamentos para crear el clima de confianza que requiere la cooperación entre los diferentes actores de la región?
Nos basamos en el respeto y la tolerancia. Todo el mérito es de los países miembros que comprenden la importancia de mantener este punto de encuentro.
En su experiencia, ¿qué importancia tiene la innovación en el desarrollo de los países?
La innovación juega un papel central en el desarrollo de nuestros países. Vivimos en un escenario marcado por un nuevo paradigma tecno económico con ciclos de vida de productos y modelos de negocios cada vez más cortos. Estamos obligados a correr esta carrera para ser competitivos. La única manera de lograrlo será colaborando, abriendo las puertas de nuestras organizaciones e invitando a resolver. Facilitando la cooperación entre grandes empresas con startups y pymes. También tenemos la oportunidad de apalancarnos con la innovación para garantizar la sostenibilidad. Tendremos que ser más innovadores para lograr empresas de triple impacto: económico, social y ambiental. En nuestro Encuentro Empresarial de la Cumbre le daremos un tratamiento central.
¿Cuál es el rol del emprendimiento en la economía de la región? ¿Considera que hay suficientes mecanismos para impulsar este sector?
Necesitamos más y mejores empresas y para ello tenemos que mejorar las condiciones del campo de juego para que los emprendedores y emprendedoras hagan los goles. Me refiero a mejorar los marcos normativos, apostar por la simplificación de trámites para que nuestros emprendedores no tengan que perder tanto tiempo en los pasillos de la burocracia pública. Tenemos que alentar herramientas de financiamiento innovadoras para que florezca la industria del capital emprendedor, tan necesaria para desarrollar ecosistemas. Todo esto estamos planteando desde la Carta Iberoamericana del Emprendimiento Innovador junto con CEIB. Un conjunto de estándares para impulsar una nación emprendedora que también faciliten la interacción entre nuestros ecosistemas. Tenemos un enorme talento en nuestra región, hay que facilitar que se canalice en empresas que generen empleos de calidad.
En términos de transformación digital e innovación en América Latina, ¿cómo ve el panorama de las empresas y mipymes en relación con otras partes del mundo?
Es impresionante lo que hemos avanzado en la región en estos años. La pandemia nos empujó a digitalizarnos. Esto batió récord en tiempos que teníamos previsto para teletrabajo, comercio electrónico o herramientas colaborativas. Tenemos que lograr que esta transformación esté al alcance de todos, hacer de este fenómeno un proceso homogéneo. Aquí la importancia de las políticas públicas para la transformación digital. En el Encuentro Empresarial de la Cumbre le prestaremos especial atención a este fenómeno y al desafío de la conectividad, factor esencial para enfrentar la brecha digital junto a la educación.
Para concluir, usted trabaja ayudando a conectar ecosistemas, pymes, los emprendedores y Gobiernos en Iberoamérica, ¿Qué es lo más gratificante de su labor?
Hay dos cosas muy gratificantes. La primera tiene que ver con el privilegio de trabajar con tanto talento creativo e innovador. Te diría que es una carga de energía sentir la pasión con la que viven los emprendedores, convenciendo y convenciéndose, tomando riesgos y parando las antenas para identificar oportunidades. Segundo, estar cerca de los conectores del ecosistema que ayudan a que las cosas pasen: responsables de gobierno, agentes de desarrollo, directores de incubadoras. Con menos prensa, pero con un papel central. Soy un afortunado de trabajar junto a ellos.