Tú quieres hacer negocios con quien te vea como persona, no como un número

De acuerdo con Rivera, la digitalización distancia a las personas y se necesita la sensibilidad del fundamento humano, esa que garantiza la pequeña gran diferencia para repetir una compra, la constancia de un servicio, o la solidez de una sociedad de ganancia productiva.

Por la influencia de su abuelo, quien era un barbero lector, o quizá un lector barbero, José Daniel Rivera decide dedicarse a ser motivador y facilitador de talleres de capacitación. “Cuando cumplí 7 años, él llegó con un paquete que me entregó sin más. Era un libro: Las fábulas de Esopo. Mi vida profesional comenzó a moldearse desde ese día. Me hacía relatar cada fábula, y me exigía interpretarla, extrayendo el mensaje, y cómo podría compartirlo con las personas.

Yo solo quería ver muñequitos, pero él me hacía leer. No sabía que él estaba legando un tesoro invaluable para mi existencia”.

Desde entonces, compartía esas historias en su escuela y, luego, ya como adolescente, empezó a trabajar como Guía de turismo. “Mi inexperiencia superaba a mi entusiasmo, y por eso me estrellaron muchas puertas en la cara cuando las toqué”, pero afirma que decidió aceptar cada rechazo como algo no definitivo. Ingresó a la universidad y hasta hoy “ser un motivador es mi mundo y ser un facilitador es mi convicción”.

Sus talleres motivacionales tienen el foco puesto en que la persona sea capaz de transformar y reconstruir sus habilidades blandas y directivas, para enfrentar con seguridad el desafío que implica la migración obligada hacia la transformación digital y el nuevo comportamiento humano pospandemia. Según relata, el cambio inminente, liberación del stress laboral, toma de decisiones precisas, delegación bien enfocada, gestión directa de conflictos, y la reinvención transformadora, son solo algunas de las urgencias actuales más demandadas por el mercado corporativo. “Nuestro enfoque es simple: Facilitar contenido y actividades 100 % prácticas, con discusiones y vivencias reales, donde la teoría vaya implícita”.

Antes de la pandemia, cuando las empresas solicitaban sus servicios, siempre buscaban un taller funcional con diagnóstico y seguimiento para fortalecer habilidades blandas o directivas, que permitieran un trabajo ideal en sus equipos, que garantizara e incrementara el compromiso de su gente, y así generar un alto desempeño laboral.

“Ahora solicitan un reenfoque motivacional e inspiracional, que despierte y alivie las mentes afligidas de sus colaborares, que necesitan superar la ansiedad, el stress y el trauma vivido con el virus, para volver a los niveles óptimos de desempeño a pesar de la tensión existente. Esto último nos ha inspirado a crear un método exclusivo motivacional, que ha crecido de forma orgánica por ser el primer contenido práctico, y muy humano, que existe en el mercado de la facilitación profesional”, expresa.

Sus publicaciones en LinkedIn fueron, poco a poco, impactando en los miembro de esa comunidad y, por esas reacciones y comentarios, que permiten a otros ver ópticas que quizá no habían considerado hasta ese momento, Rivera ha sido distinguido como Top Voices por la plataforma digital. “Significa descubrir que te enamoraste del resultado, pero aún más del esfuerzo que implica el compromiso de publicar contenido de calidad en una comunidad exigente y con tan alto nivel. Es tener la certeza que, al compartir una idea, esta apoyará a quien la necesita en ese momento.  O las que se publiquen también me aporten en momentos de necesidad”.

Para él el éxito es transformar los conceptos personales y sobresalir siendo auténtico, basado en un nivel de autoexigencia que produzca bienestar propio y común. En este sentido, se considera solo como “un inconformista pensante que no teme desafiar paradigmas.  Eso implica valor, y el valor quizá genera cierto nivel de éxito”.

A lo largo de su experiencia profesional, señala que la gran lección aprendida es que “lo único importante es cómo lucen los rostros más hermosos que viven en tu hogar cuando comparten contigo, porque a pesar de que les has robado tiempo, has limitado tu cercanía, has separado su unión contigo, o hasta han soportado tu mal humor por cualquier frustración profesional… te esperan; y te reciben con esa alegría que nadie más te puede hacer sentir ni demostrar”.

Ese factor humano, para él,  es la mejor inspiración que puede existir y la mayor motivación para nunca rendirse, a pesar de los obstáculos. “Ese es el trabajo de José Daniel: Inspirar una verdadera Motivación”.

Para finalizar la conversación con Factor de Éxito, quiso compartir algunas actitudes y sugerencias que le han sido de mucha utilidad a nivel personal:

-Desafía tus miedos.

-Respeta a cada persona por igual.

-Ten disposición para reinventarte.

-Sé inconformista y aprende a cuestionar.

-Todo lo que hagas,  disfrútalo con gozo infantil.

-Espera lo inesperado pero anticípate a su llegada.

-Haz algo significativo y valioso por quien menos merece de ti.

-Ten audacia para los retos y prudencia para lo que no conviene.