El gas natural aterrizó en España en la década de los 60, concretamente en Barcelona. Con el paso de los años, su utilización se ha ido extendiendo por el largo y ancho de la Península Ibérica, aunque todavía hay puntos en los que no está disponible.
El bajo precio y la limpieza de este combustible fósil lo han convertido en la opción predilecta para disfrutar de calefacción y agua caliente, entre otras cuestiones, en detrimento del gas propano canalizado o las bombonas de butano. Así, te contamos todo lo que necesitas saber para dar de alta el gas natural.
¿Cuándo es necesario dar de alta el gas natural?
En el momento de dar de alta el gas natural, el primer paso a realizar es comprobar si se dispone de instalación de gas. Por norma general, todos los edificios que ya han estado habitados cuentan de la misma y tan sólo será necesario ponerse en contacto con la compañía.
Por el contrario, es probable que las viviendas de nueva construcción no tengan de momento la instalación. En ese caso, debes comprobar si la red de distribución de gas natural llega hasta tu vivienda. De ser así, has de corroborar que en la comunidad de vecinos gozan de la Instalación Receptora Común (IRC) y solicitar el IRI (Instalación Receptora Individual). Con respecto a las viviendas unifamiliares, hay que pedir un presupuesto a la comercializadora para que haga llegar la red al punto de suministro.
¿Cuál es el precio de dar de alta el gas natural?
El coste de dar de alta el gas natural depende tanto de los derechos de acometida como de alta, la tarifa que se tiene contratada y los años transcurridos sin que la vivienda cuente con gas natural.
En el caso de inmuebles de nueva construcción o en los que no se ha renovado el gas natural en los últimos cinco años, en el precio estarán incluidos tanto los derechos de acometida como los de alta. El precio de estos últimos los fija cada comunidad autónoma, dependiendo de la tarifa. Por ejemplo, para una vivienda en Andalucía con una tarifa 3.1 (de hasta 5.000 kWh al año, el precio es de 72 euros.
En lo que respecta a los derechos de acometida, el precio varía en función del consumo. Si requieres menos de 5.000 kW/h al día, el coste será de 128,67€. Por el contrario, en una vivienda que precise hasta 50.0000 kWh, se pagarán 591,48 €.
Sumado a ello, en el caso de que se trate de una vivienda en el que no ha transcurrido ese lapso de 5 años desde la baja, tan solo se tendrán que abonar los derechos de alta.
¿Qué documentación necesitas para dar de alta el gas natural?
El gas natural se puede dar de alta tanto en el mercado libre, regido por las comercializadoras de energía, como en el mercado regulado, siendo el Estado quien fija el coste a través de la Tarifa de Último Recurso (TUR). En cualquiera de los dos casos, la documentación a presentar es la siguiente:
El plazo para poder disfrutar del gas natural es de cinco a siete días hábiles desde que la distribuidora efectúa la solicitud.
Ventajas de contratar el gas natural
El gas natural dispone de múltiples ventajas en comparación con los gases licuados de petróleo (GLP), como son el butano y el propano. Aunque una bombona de butano puede ser una opción efectiva en una segunda residencia cuando el consumo no es demasiado elevado, los beneficios del gas natural lo convierten en el predilecto: